Pla, un catalán en Madrid


La primera vez que estuvo en Madrid tenía 22 años y no le gustó en exceso. El catalán Josep Pla viviría en la capital durante unos meses en 1921 y volvería diez años después para quedarse hasta el 36. Observaría (y escribiría) cómo se advenía la república y cómo el país entraba en guerra civil.


“No le gustaba Madrid, pero tampoco mucho Barcelona”, escribió Francisco Umbral en Las palabras de la tribu. Pero de su estancia en Madrid sacó muchas de sus mejores páginas. Parte de ellas las público años más tarde en el libro Madrid. El advenimiento de la República. Había llegado a Madrid la misma mañana de la proclamación de la II República, como periodista enviado por La Veu de Catalunya. Durante todo ese tiempo, además, escribe la obra que se recoge en su dietario.

“¿Por qué razón se me ocurrió, estando en Madrid, llenar las hojas de un dietario? A veces me lo pregunté. Es una necesidad que no he necesitado en ningún otro lugar. Meditando alguna vez sobre ese punto, he llegado a pensar que el origen de tales veleidades hay que encontrarlo en que, en Madrid, no he tenido nunca nada que hacer”. Así justificó Pla este dietario vital. Después añadió: “…Nada. Respirar, vivir, ¿observar?”.

Todo esto se muestra hasta el 25 de abril en la sala la Blanquerna, situada al lado del Círculo de Bellas Artes, en Madrid, en una exposición que recoge fotos y escritos sobre las estancias madrileñas del autor.

Cafés llenos sólo de hombres, azoteas llenas sólo de mujeres… una mirada captada. Escritores, tertulias, políticos, geografía humana… en un pequeño, pero interesante homenaje al escritor catalán. Además, se expone un video con una amplia entrevista (aunque de muy mala acústica) en la que Pla se define como un “escritor que ha leído mucho”, se instala en el escepticismo y defiende que no hay más remedio que ser irónico. Además, recuerda a figuras como Pío Baroja, Antonio Machado o Julio Camba.

La exposición se complementa con cuatro conferencias, durante los próximos cuatro miércoles, en las que se debatirá sobre diferentes facetas del escritor: la de Pla periodista, la de sus luces y sus sombras, la del escritor antes y después de la guerra, y la de Pla memoralista.
Josep Pla. Más de 25.000 páginas escritas. Un auténtico grafómano.